¿Qué es la inferencia abductiva? La intuición que guía a la ciencia

ciencia
filosofía
método
Autor/a

Antonio Matas-Terron

Fecha de publicación

18 de septiembre de 2025

¿Qué es la inferencia abductiva? La intuición que guía a la ciencia

Cuando se habla de cómo avanza la ciencia, solemos escuchar tres palabras: inducción, deducción e hipotético-deducción. Los manuales nos dicen que los científicos observan, generalizan, formulan hipótesis y las ponen a prueba. Pero esa no es toda la historia. Existe otra forma de razonar que durante mucho tiempo pasó desapercibida, y que resulta especialmente poderosa en Ciencias Sociales: la abducción.

Los métodos clásicos… y el gran ausente

  • Inductivo: de lo particular a lo general.
  • Deductivo: de lo general a lo particular.
  • Hipotético-deductivo: se formulan hipótesis, se deducen consecuencias y se contrastan.

Podríamos añadir también el razonamiento analógico, que compara casos semejantes. Pero aquí falta un invitado. El filósofo estadounidense Charles Sanders Peirce fue el primero en darle nombre: inferencia abductiva. Una forma de razonamiento que busca la mejor explicación posible a lo que tenemos delante, aun sin pruebas concluyentes.

Tabla comparativa de los razonamientos

Tipo de razonamiento Punto de partida Resultado esperado Ejemplo en Ciencias Sociales
Inducción Casos particulares Generalización Observar repetidamente que la pobreza se relaciona con bajo rendimiento y concluir que ambas variables están ligadas.
Deducción Principio general Caso concreto Si toda política inclusiva busca equidad, una nueva ley inclusiva también lo hará.
Hipotético-deductivo Hipótesis provisional Contraste empírico Formular que el uso intensivo de pantallas reduce la atención y comprobarlo con datos.
Abducción Hecho sorprendente Mejor explicación plausible Explicar por qué en un barrio no existen asociaciones juveniles: tal vez la inseguridad lo impida.

La lógica de “la mejor explicación”

La abducción es, en esencia, un salto de intuición. Imaginemos que vemos un fenómeno extraño. Ni la inducción ni la deducción parecen dar respuestas claras. Entonces aparece la hipótesis abductiva: si esto fuera cierto, lo observado tendría sentido.

No es una certeza, es una conjetura bien fundamentada. Es el tipo de razonamiento que guía la investigación cuando no sabemos por dónde empezar.

Historias abductivas en Ciencias Sociales

  • En un barrio urbano: una socióloga se sorprende al descubrir que apenas hay asociaciones juveniles activas, mientras en barrios vecinos abundan. Los datos no dan pistas inmediatas. Una hipótesis surge: quizás la percepción de inseguridad está frenando la vida comunitaria.

  • En una escuela secundaria: una orientadora observa que tres estudiantes brillantes empiezan a faltar a clase. La abducción la lleva a pensar: ¿y si estuvieran sufriendo acoso escolar?. Esa idea inicial orienta las siguientes entrevistas.

  • En unas elecciones locales: un politólogo nota que un partido arrasó en municipios rurales, mucho más de lo esperado. Surge la hipótesis abductiva: quizá lo decisivo no fue la campaña en redes, sino el contacto directo entre vecinos.

¿Por qué importa?

En las Ciencias Sociales, los fenómenos suelen ser complejos, ambiguos y multicausales. La abducción es la herramienta que nos permite generar explicaciones plausibles cuando los datos aún no hablan con claridad. Es, en cierto modo, la chispa que enciende la investigación.

La próxima vez que te encuentres con un fenómeno extraño —en la universidad, en el trabajo, en tu barrio— piensa en Peirce: quizá una conjetura razonable sea el primer paso hacia una gran explicación. ```

💡 Y tú, qué opinas?
¿Has vivido alguna vez una situación en la que tuviste que formular una hipótesis para explicar algo que no entendías del todo? Comparte tu experiencia en los comentarios: tu historia puede ser el punto de partida de otra gran explicación.